Posted on mayo 7, 2025 View all news
por Crystal Collier, PhD, LPC-S
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Compartir las luchas de salud mental de su hijo, o la pérdida de su vida debido al consumo de drogas, la sobredosis o el suicidio, requiere inmenso valor y amor. Si bien puede honrar su memoria y servir como una advertencia para otros, a menudo desencadena una ola de emociones complejas conocidas como resaca de vulnerabilidad, una experiencia profundamente incómoda pero común.
Comprender las resacas de vulnerabilidad
Después de compartir historias tan personales, los padres o cuidadores pueden esperar curación y empoderamiento, pero en cambio se enfrentan a sentimientos abrumadores de vergüenza, arrepentimiento o inquietud. Las resacas de vulnerabilidad pueden ser desmoralizantes. Esta consecuencia emocional puede conducir a la duda de uno mismo y al deseo de desconectarse. Reconocer estos sentimientos como parte del proceso es esencial para construir resiliencia. Los síntomas de las resacas de vulnerabilidad pueden incluir:
- Miedo a ser juzgado por las decisiones de crianza.
- Intensa vergüenza o arrepentimiento ligado a sentimientos de fracaso.
- Dar vueltas a si se compartió demasiado o revisar escenarios de «qué pasaría si».
- Aislamiento o alejamiento de los demás debido a la exposición emocional.
Por qué es importante compartir su historia
La mayoría de la gente nunca oye hablar de todas las noches de insomnio, el miedo a ‘las’ llamadas telefónicas, los centros de tratamiento, las recaídas desalentadoras y las perturbaciones familiares. A pesar de la incomodidad, compartir sus experiencias sigue siendo vital. Logra varios objetivos críticos:
- Concienciación: Alerta a otros sobre los peligros a los que se enfrenta la juventud moderna, como el fácil acceso a sustancias potentes a través de las redes sociales.
- Educar y salvar vidas: La vulnerabilidad fomenta la conexión, rompe el estigma y capacita a las familias para que actúen pronto al abordar los comportamientos de alto riesgo.
- Impulsar el cambio de políticas: Las historias personales son herramientas poderosas para abogar por mejoras sistémicas en la salud mental y el apoyo al abuso de sustancias.
- Honrar a su hijo: Compartir su historia preserva su legado al tiempo que apoya a otras familias que enfrentan desafíos similares.
Laura Stack, de Johnny’s Ambassadors, que perdió a su hijo por suicidio cuando estaba en una psicosis inducida por el cannabis, dice: «Cada día, cuando comparto mi historia con padres y adolescentes, sana un poco más mi corazón roto».
Vea esta entrevista con la Dra. Collier y Laura para obtener más información.
Estrategias de afrontamiento
Cada persona reacciona de manera diferente a la incomodidad que puede surgir al contar su historia y la de su hijo. Para afrontar las resacas de vulnerabilidad de forma eficaz:
- Acepte que la incomodidad es parte de la toma de riesgos emocionales.
- Recuérdese que la vulnerabilidad fomenta la curación y la conexión.
- Anticipe los sentimientos y el agotamiento que pueden provenir de una resaca de vulnerabilidad.
- Busque el apoyo de personas de confianza o profesionales si los sentimientos se vuelven abrumadores.
- Planifique un tiempo de inactividad y cuidado personal directamente después de compartir su historia y posiblemente durante algunos días después.
Compartir su historia no es solo un acto de valentía, sino también un paso hacia la curación, la defensa y el honor de sus experiencias como padres y la vida de su hijo.